Recuerdos. Cap12

Holis!!, sufrí mucho para poder pasar este cap, primero me quede sin lap, por lo cual mis hermana y padres me quitaban a cada rato de la PC cuando lo quería pasar, y ps no podía terminar, y después por mi mala suerte en la escuela las computadoras se volvieron lentas y se trababan y cuando avanzaba ya no me dejaba guardas los cambios O.O

pero al fin encontré una donde lo pude terminar, mientras escuchaba el concierto 1 de Tegomass ♥

que mejor inspiración que escuchar a los protagonistas del fic :D.

Este cap es mas largo que los demás, solo como recompensa de la tardanza, creo son cerca de dos paginas o pagina y media de más (claro, en word). Espero les agrade y espero comentarios ;)

Nombre: Recuerdos
Extensión: Serial
Parejas: TegoMass, KoyaShige
Genero: Slash, Fluff, Lime
Capitulo: 12/18

Después de por fin calmarse, y haberse desahogado, quiso ser coherente y pensar acerca de lo que paso, recordando cada una de las cosas que sucedieron ese día, para poder al menos entender por qué Massu se retiro a su habitación.

Todo había parecido un sueño, primero abrir los ojos y ver al mayor tan cerca de su rostro, después el estar sujetos de las manos hasta entrelazar sus dedos y al final… ¡Bang! Massu se fue

Pensó y pensó… cuando se fue, fue después de que la señora Masuda mencionara lo de la chica, tal vez… tal vez Massu se enojo o más bien, puesto celoso por eso.

Le dio muchas vueltas al asunto y siempre llegaba a la misma conclusión, además antes había pasado un avance más allá de su amistad, dos chicos no se toman de las manos porque si, o eso estaba pensando. No fue error o mera coincidencia, de eso estaba seguro.

El enfado de Massu no podía asegurar que fueran celos, pero para averiguarlo debía preguntarle directamente, no quería crearse falsas esperanzas, pero estaba ya un poco más animado de cuando llego a casa.

El beso con la chica no fue nada especial y solo había sido en la mejilla, aquella mañana Kato le envió un mensaje, citándolo en la entrada del parque cerca de su casa; no sabía la razón de eso, ya que no habían planeado verse o hacer algo. Pero supo por que lo había llamado cuando estaba cerca de aquel parque, vio a una chica junto a Shige, y claro estaba que no era su novia.

Cuando llego a ellos, enseguida Kato se despidió de ambos sin antes presentarlos, y como relámpago huyo de Yuya dejándolo solo con aquella chica.

Era linda y delgada, parecía menor que ellos, pero con una mirada hermosa.

Esta chica de nombre Sora se le declaro en ese momento, diciendo que lo admiraba y lo observaba en la universidad. Aunque fuese linda a Tegoshi no le gustaba y la rechazo amablemente; pero ella pidió un pequeño beso en la mejilla, por lo cual él no se negó, dando como recompensa por su valor a la chica y en agradecimiento de sus sentimientos hacia él.

 Tal vez en ese momento pasó la señora Masuda y lo vio posando sus labios en la mejilla de Sora, entendiendo mal las cosas.

A Tego se le ocurrió explicarle eso a Massu, y pretendía hacer lo que se prometió nunca hacer… declararse.

Limpio con la manga de su suéter los rastros de lágrimas que aun quedaban y de un salto se levanto animado; estaba decidido en decirle a Massu sus sentimientos y dispuesto a recibir cualquier respuesta.

Salió de su casa con una sonrisa, ya que estaba demasiado confiado en que sería aceptado.

Toco la puerta de enfrente y espero paciente, moviéndose un poco de los nervios. No había pasado más de una hora desde que había salido de esa casa, y no sabía decir la razón por la cual volvía.

Tampoco sabía cómo se le iba a confesar a Massu, ¿Cómo comenzaría a decirle?, y si lo aceptaba ¿le besaría de inmediato?, tantas cosas pasaban por la mente de Yuya en solo segundos de espera.

Escucho unos pasos acercándose y enseguida abrieron.

-Yuya-kun ¿olvidaste algo? – era la hermana de Massu quien abría la puerta

-No… solo quería decirle algo a Takahisa-kun

-¿Puedes regresar más tarde?, es que mi hermano está tomando una ducha

-entiendo… -bajo la mirada con un poco de resignación, tal vez su confesión debía esperar más tiempo

-pero si gustas lo puedes contactar por internet, todas las noches se conecta, por ahí pueden hablar, ¡ne?

Tego subió la mirada con un brillo en los ojos, esa era buena idea, tal vez no se le confesaría por ese medio, pero al menos podía hablar con el acerca de porque se enfado. Hasta que de nuevo su esperanza se fue.

-Pero… no tengo su correo – dijo, después de recordar que jamás había intercambiado numero o correo con él.

-por eso no te preocupes, yo te lo paso, solo espera aquí

Así obedeció Tegoshi y espero, no paso mucho cuando estaba de vuelta la hermana de Masuda, quien le entrego un trozo de papel y en él estaba escrito el correo y teléfono de Takahisa

-Ten, espero te sea de mucha ayuda… mi hermano se conecta alrededor de las 7 de la tarde.

Sonriente Tegoshi se despidió y agradeció la ayuda; regreso a su casa feliz, y estando dentro de su habitación encendió el ordenador impaciente por agregar a su vecino.

En cuanto este se prendió completamente, abrió su correo y lo agrego. Después solo tenía que esperar a que se conectara.

Espero paciente frente a su PC, viendo videos, escuchando música y por ratos jugando juegos en línea, así se la paso esperando a que Massu pudiera conectarse; ya un poco impaciente comenzó a navegar sin sentido alguno.

Cuando el aburrimiento se apropio de él decidió apagar su ordenador, pensando que quizás ese día su vecino no se conectaría, pero, antes de hacerlo una luz verde apareció en el nickname del recién agregado por él.

Massu se sorprendió un poco al abrir su correo, tenía una nueva solicitud, y era nada menos que de Tegoshi, sin pensarlo mucho lo acepto, aunque una duda le inundaba el pensamiento, “¿Cómo había conseguido su corre?.

Feliz por ver a Massu y quien lo acepto, se armo de valor y abrió una conversación con él.

T: Hola!!!

M: ¡Hola!

Su mensaje fue rápidamente contestado, haciendo que quisiese gritar de emoción, pero se contuvo porque espantaría o llamaría la atención de su madre y abuela.

M: siento haberme comportado así en la comida, solo que me sentí mal del estomago

Mintió de nuevo al menor.

T: Comprendo J

M:  ˆ-ˆ!!

El mayor había pensado que aunque Tegoshi demostrara no quererle como él lo quiere, sabía que no tenía razón por la cual enojarse, así pues había decidido estar junto a él, aunque en un momento dado este tuviese novia, vería la manera para no encelarse.

M: creo que perdimos un poco el tiempo, será mejor pensar en alguna manera de acercar a Koyama y Shige y que puedan estar juntos nuevamente.

T: creo ya sé cómo.

Tegoshi comenzó a escribir mucho, acerca de lo que en ese momento se le había ocurrido para que sus amigos se pudieran ver, sin que la madre de Kato lo impidiera, sin acordarse por que había agregado a Massu y lo que le quería preguntar, ya que la mentira de Massu de que se sentía mal, no se la creía.

Duraron hablando del tema por mucho tiempo, hasta por fin planear algo que resultaría, a menos que Kato o Koyama no cooperaran.

Se hizo muy tarde y aun estaban conversando de un sinfín de cosas, unas graciosas y otras recuerdos de su infancia, pero igualmente agradables.

Ninguno de los estaba dispuesto a ir a dormir, se sentían cómodos conversando por ese medio, ya que así sus nervios o sentimientos no serian revelados.

Al final se despidieron, por percatarse que la mañana llegaba, quedaron de realizar su plan justo el sábado que vendría.

Ambos desvelados se levantaron para ir a sus respectivas universidades. Pero no les importaba demasiado, ya que había valido la pena.

Toda la semana por la noche y habiendo cada uno terminado sus labores del colegio se conectaban y conversaban, ya que por las tardes no se veían.

Tan pronto llego el sábado, y más cercanos los dos, despertaron para empezar su plan.

En la casa de los Tegoshi, Yuya se levanto rápido como ya era costumbre y baño, después coloco su uniforme de futbol, antes de bajar a desayunar, saco su celular y mando un mensaje

“Kato-chan, acompáñame a mi partido de futbol que será hoy!!!! J

Necesito hablarte sobre algo importante que me acaba de suceder

Te veo en la desviación en 30 min para irnos juntos.

P.D. No olvides llevar comida que tendré mucha hambre”

Su celular sonó despertándolo, lo tomo y miro el nuevo mensaje que tenía, era de su amigo Tegoshi. Se sentó en la cama y comenzó a leer. Al terminar de leer aquel mensaje se enfado, pero ya era costumbre que su amigo le avisase a la mera hora, además de que ni siquiera le preguntara si deseaba ir o no, y por supuesto no quería ir, ya que tenía mucho sueño.

Se pregunto qué era eso importante que Yuya le quería decir. Se levanto de la cama, y lavo su rostro en el baño, después se vistió, no se ducho pues ya era tarde, además lo había hecho la noche anterior.

Al mensaje de Tego solo contesto:

“te pateare por despertarme, y en cuanto a la comida llevare lo que encuentre para hacer, así que no te emociones, por que no será un festín”

Al haberlo mandado fue directo a su cocina y saludo a su madre quien estaba ahí preparando la comida del día. Abrió el refrigerador y la alacena y saco algunas cosas que vio que le podían ser de utilidad.

-¿vas a salir Shigeaki? – pregunto su madre curiosa, viéndolo apurado

-sí - contesto – Yuya quiere que lo acompañe a un partido, y si no lo hago estoy seguro que se pondrá de caprichoso en la semana y me va a hacer muchas más travesuras de las que suele hacerme.

-Está bien, ¿Cómo a qué hora vendrás a casa?

-no lo sé, tal vez tarde por qué quiere decirme no se qué cosas-

Su madre termino de hacer la comida y salió de la cocina para hacer los demás deberes del hogar, mientras dejo a su hijo preparando algunos aperitivos para su amigo de la infancia.

Yuya bajo a desayudar un poco, después vacio su morral deportivo y se sentó en la sala esperando la señal de Massu.

Mientras tanto en la casa de los Masuda, Takahisa se había levantado muy temprano para poder hacer las cosas tranquilamente y sin ninguna presión, ya que no le gustaba presionarse por las cosas, se ducho, se vistió y desayuno apropiadamente, cuando vio la hora de partir, salió de su casa y se dirigió a la de enfrente, tocando la puerta.

Rápidamente Yuya la abrió, pues bien sabia de quien se trataba.

-¡Hola! – Lo saludo Massu con una gran sonrisa en el rostro – ¿estás listo?

-Sí y también muy animado – contesto el menor – espérame, voy por mi morral

Entro a su casa y tomo su morral vacio, y se despidió de su madre.

Salió y ambos caminaron juntos, sin dejar de decir lo bien que saldría su astuto plan. Llegaron a la desviación y el mayor dejo a Yuya ahí sentado, mientras él seguía su camino, tomo la ruta que llevaba a la casa de Kato y también a la de Koyama.

Camino tranquilamente mientras escuchaba música de su mp3, paso frente a la casa de Kato y miro que este no lo viese; camino un poco más hasta estar justo en frente de la casa de Koyama, su viejo amigo y al cual no había hablado o visto desde hacía un tiempo.

Toco el timbre y espero a que alguien saliera.

No tardaron mucho en abrirle, era una chica mayor que él.

-¡Buenos días! – Dijo amablemente - ¿se encuentra Keiichiro-san? – dijo su nombre, para que la chica supiese que es un amigo, pero también lo menciono con respeto.

-¡buenos días!, sí, se encuentra… ¿Quién lo busca?

-solo dígale que lo busca Massu, el sabrá reconocerme rápidamente.

-Está bien, pero entra y espéralo en la sala, aun se encuentra dormido, pero enseguida lo despierto.

-Gracias

Entro a la casa de Koyama  y la chica le indico en donde estaba la sala, cuando llego se sentó y comenzó a ver los cuadros familiares que lo rodeaban, todos ellos con la madre de Keii, su hermana y madre.

La chica llego a la habitación de su hermano y toco la puerta fuertemente y llamándolo

-¡Keii, te buscan haya abajo!

Enseguida le abrió su hermano quien estaba tratando de despabilarse y quien estaba aun en pijama.

-¿Quién me busca?- pregunto curioso, ya que no tenía muchos amigos, y los pocos que tenia no sabían en donde vivía.

-me dijo que era Massu… ¿lo conoces?

Keii pensó un poco y recordó a su antiguo amigo.

-Sí, lo conozco, dile que me espere un poco más

Cerró su puerta y se coloco rápidamente las primeras ropas limpias que encontró en su armario, después fue al baño a lavarse la cara y peino un poco su revuelta cabellera.

-El bajara en unos momentos – dijo la hermana de Keii a Massu

-Gracias! –respondió

No paso mucho para que Koyama bajara.

-¡Hola Massu-chan! ¿Qué te trae aquí? – pregunto curioso y desconcertado, ya que hacía mucho que no lo veía.

Massu al escuchar a Keii se levanto del sillón y con una gran sonrisa le dijo:

-¡Hola!, solo creí que ha pasado mucho desde que no conversamos y quise pasar a saludar ya que me encontraba cerca

-es cierto, ha pasado un tiempo.

-… bueno… en realidad quería ver si tenias un tiempo para salir a caminar

-¿ahora?

-bueno, Sí, si es que puedes

Koyama pensó un poco sobre los deberes que debía hacer, pero al recordar que no eran demasiadas cosas, acepto gustoso.

-espérame un poco, solo iré por mi cartera

-está bien.

Massu camino a la entrada, donde espero al mayor de ambos.

Keii bajo corriendo y con una chaqueta puesta, la cual no traía anteriormente.

Comenzaron a caminar sin decir mucho, cuando llegaron a la desviación vieron a Tegoshi sentado aburrido en la banqueta. Pasaron junto a él y Keii lo saludo rápidamente, mientas que Massu disimulo no hablarle, después siguieron caminando.

-Veo que aun no le hablas – dijo Keii

-¿eh? … S-si – dijo dudoso, ya que no era así, pero debía disimular que el mayor tenía razón. Además él siempre había notado sus sentimientos hacia Tegoshi, lo cual ni Kato o Tego sabían o había percatado. – A veces cenamos juntos, porque nuestros padres se llevan muy bien, pero no ha pasado mucho.

-Ya veo, ¿y aun le quieres?

-Si – sabía que a su sempai no podía mentirle acerca de sus sentimientos. –pero he decidido guardarlos, para no incomodarlo

-¿entonces jamás le piensas hablar de lo que sientes? – le pregunto con voz suave Koyama

-no tiene caso, además creo tiene novia, mi madre lo vio besándola.

Sorprendido Koyama respondió

-jamás creí que llegase a tener novia, pues él también… mmmmmm… olvídalo

-el también ¿Qué?- pregunto Massu

-nada, no importa si ahorita tiene novia, tal vez me equivoque acerca de mi suposición del pasado.

No caminaron demasiado cuando Massu se detuvo.

-Ya llegamos – dijo señalando el parque que estaba frente a ellos

-¿aquí me querías traer? –pregunto incrédulo y asombrado. Aquel parque le traía buenos recuerdos de su adolescencia cuando estuvo un rato con Kato y se veían ahí..