Recuerdos Cap 3

Lo cumplí!!! :), el siguiente lo pondré el jueves, espero puedan esperar, ne!. En este se ve un poco lo que piensa Massu, el cual sigue sin saber porq Teshi no le habla @.@... ya en el siguiente cap se sabrán mas cosas, y pondré lo ocurrido con Koyashige :/ ...
weno espero les guste.

Douzo!

Nombre: Recuerdos
Extensión: Serial
Parejas: TegoMass, KoyaShige
Genero: Slash, Fluff, Lime
Capitulo: 2/18

-yuya-kun, ve por favor por los panes, están encima de la alacena- le ordeno su madre.

Se paro desganado e hizo a un lado su silla

- que te acompañe Taka-chan- completo su abuela a la orden de su madre, dejándolo en seco y no podía negarse ya que todos se darían cuenta que lo estaba evitando

Massu no sabia que hacer, si rehusarse o seguir con lo que la abuela había dicho, pero al ver que Tego no se oponía, se levanto de su lugar, yendo detrás de él. Ya en la cocina, solo observaba como su vecino acomodaba los panes en dos charolas, pero aquel no volteaba un poco a mirarlo.

Se sentía un poco incomodo con aquel ambiente, pero no tenia de otras, más que seguir así; aunque en sus pensamientos tenia unas cuantas preguntas, una de ellas era ¿el porque ya no se hablaban mas?, pero tenia un poco de pena el hacerlo y sin querer pensarlo mucho, comenzó a hablar.

-Hace mucho que no eh estado por aquí - dijo tratando de hacer conversación.

Tegoshi se asombro mucho, creyó que en todo ese tiempo no le diría nada, ademas sus piernas le temblaban, estaba muy nervioso y solo trataba de concentrarse en acomodar lo panes, aunque era casi imposible.

-¿eh?...¡oh!... es cierto ... pero creo que la hemos cambiado un poco
-ya veo

y el silencio apareció de nueva cuenta

Tego termino de acomodar aquello y le dio una charola a Massu, para que lo llevara a la mesa.
Salieron de la cocina, cada uno con una charola y las colocaron en el centro de la mesa; después tomaron asiento en sus respectivos lugares.

-espero les agraden estos panes al vapor que prepare. unos están rellenos de chocolate y otros de frambuesa- dijo la señora Tegoshi
-Los que usted prepara son muy deliciosos, a mi hijo le encantan desde pequeño, ¿verdad Taka-chan?
-Si, son muy sabrosos. - contesto un poco apenado y observando un poco a Yuya
-Creo que mi hijo le empezaron a gustar, cuando Yuya-chan le regalo uno

Antes de esto, Tego ya había tomado un pan y lo había mordido, cuando escucho aquellas palabras de la señora Masuda, casi se atraganta, de lo sorprendido que quedo, comenzó a estornudar y tomo un poco de agua.

-¿estas bien hijo?- pregunto la abuela en tono de burla

Se aclaro la garganta y apenas pudo contestar un "sí"

Mientras Massu lo seguía observando, tal vez Tego se acordaba de esa ocasión, y al pensar eso, se ruborizo un poco.

Las señoras continuaron conversando, mientras comían algunos cuantos panes; Tego por su parte comenzó a comer rápido, para poder retirarse a su habitación; ya había perdido la cuenta de los panes, pero es que en su mente solo pasaba la idea de que gracias a él, a Massu le gustasen aquellos panes rellenos de chocolate. Trataba de aclarar sus ideas, pero teniéndolo en frente, era imposible. Aunque en su corazón había llegado una nueva esperanza de volverle a hablar .

Termino de comer, recogió su plato y dio gracias por la comida, despidiéndose de los invitados y yéndose directamente a su cuarto..

Se tiro a su cama, tratando de analizar la situación. Aquel día en el que le dio aquel pan al vapor, fue el mismo en el cual se le declaro... ¿como era posible que aun lo recordara, mas aun, que la señora Masuda supiera del pan que le dio. Su cabeza se lleno de muchas dudas, las cuales podía saber si hablaba con Massu, lo cual ... jamas iba a suceder.

A pesar que le dolía la cabeza de tanto pensar, su corazón estaba feliz.

Para poder tranquilizarse, tomo un libro que tomo al azar de su librero y lo comenzó a leer recostado, ya eran cerca de las 2 de la mañana, y el sueño comenzó a invadirlo, quedándose dormido.

El siguiente día era Sábado, así que no había problema en quedarse dormido hasta tarde.
Llego la mañana y el sol se colaba por un espacio entre las cortinas, pegandole en la cara, lo cual hizo que se despertara, abrió los ojos, miro el reloj y ya eran las 9 de la mañana, así que solo se cubrió la cara y siguió durmiendo.

Al poco tiempo su madre toco a su puerta y al no escuchar respuesta alguna departe de su hijo entro.

-¡Yuya! ya levántate, se te hace tarde

Abrió las cortinas y movió un poco a su hijo, el cual despertó un poco, pero al ver que no le hacia caso, le quito de encima las cobijas.

-Te digo que ya es tarde... ¡levántate perezoso!
-mmmmh!! - se dio la vuelta y trato de seguir durmiendo

su madre le dio una buena nalgada, para que se despertara, lo cual hizo que se diera la vuelta y se sentara en la cama.

-¡Mamá! ... hoy es sábado y no tengo clases
-eso lo se, pero tienes un partido, el cual creo a ti se te ha olvidado

Salto de su cama, y saco a su madre de la habitación para poder cambiarse.

-me hubieras despertado antes ...

su madre le envió una mirada matadora y tras de ella se cerro la puerta

se coloco el uniforme del equipo, y guardo ropa limpia en su morral de deporte . Bajo apresurado las escaleras, mientras su madre ya lo esperaba con el desayuno.

-antes de irte debes de desayunar, si no, no saldrás de aquí.

Comió lo mas rápido que pudo, termino con la mayor parte de lo que había en su plato y corrió a la entrada, para ponerse sus tacos y guardo los zapatos normales, para cuando regresara.

Salio lo mas rápido que pudo, pero se llevo un susto mayor, en la entrada había alguien parado, y choco con esa persona, cayendo encima. Estando en el suelo percibió un dulce aroma y se le era familiar; reacciono que estaba arriba de alguien, se levanto pidiendo disculpas, pero al percatarse de quien se trataba se ruborizo, hasta el punto de ponerse como jitomate.

Esa persona era Massu, quien iba a tocar a la puerta, justo en el momento que Tego salio y cayo sobre él.

-l-lo siento - dijo esto mientras le dio la mano a Massu para levantarlo - es que tengo un poco de prisa
-No te preocupes - le dijo a Tego, mientras se sacudía.

Levanto la mirada y se le quedo mirando de arriba a abajo a su vecino, nunca antes lo había visto con un atuendo de futbolista, lucia muy bien en el. En seguida recordó a lo que iba

-¿Esta tu mamá?
-si, háblale por favor, o pasa, es que tengo que irme

Tego se fue corriendo de ahí, mientras Massu solo veía como se alejaba y cuando ya no lo vio mas, hizo lo que este le había sugerido... llamar a la señora Tegoshi, la cual salio.

-¿Buenos días señora!- dijo con una sonrisa habitual, pero muy linda - aquí esta el libro de cocina que mi madre le manda
-Gracias Taka-chan  y dile a tu mamá que muchas gracias
-si, claro, yo le diré

Todo fue bien en el partido que tuvo Tegoshi con su equipo de fútbol, al ultimo minuto uno de sus compañeros tiro el gol ganador.
Al llegar a su casa tomo se metió a la ducha para quitarse el sudor que llevaba encima.
Bajo a comer y después subió a su habitación quedándose un rato en la computadora, pasando las fotografías que sus compañeras habían tomado con su celular.

Después de un rato, se aburrió, ya no sabia que hacer, de pronto, escucho la risa de Massu y espió un poco por la ventana, estaba corriendo huyendo de su hermana, quien le quería pegar, por alguna travesura que le había hecho.

Se veía muy bien con el atuendo que llevaba Massu, su risa era genial, se veía tan feliz, simplemente le agradaba ver esa vista. Sonrió torpemente observando como Massu había sido atrapado, pero no tardo mucho tiempo para ser descubierto.

Massu volteo hacia la ventana del cuarto de Tego, y ahí estaba el, mirando a través de ella y observándolo.

Cerro rápidamente la cortina, y se dejo caer en el piso, toco su corazón, el cual latía muy rápido, sonrió alegre, le causaba gracia el ser descubierto así de facial, era claro que no era bueno espiando.

A su mente llego lo ocurrido en la mañana de ese día, se detuvo de reír, y se ruborizo, haciéndolo sonrojar de nuevo, y comenzó a rodar por la alfombra de su habitación. Estaba feliz, porque ese fin de semana había visto muchas veces a Massu, lo cual no había pasado desde hace mucho.

Saco su libreta del buro y comenzó a escribir lo ocurrido en esos días.
al terminar comenzó a leer, en donde se había quedado anteriormente.

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Dos años pasaron y ya casi no nos dirigíamos la palabra,  Keii-chan salio de la primaria, entrando a la secundaria. Jamas me diste una respuesta a la declaración que te hice.
Pero me entere, que tus compañeros te hacían burla, por haber recibido una tarjeta de amor, por parte de otro chico
En esos momentos no tenia el valor para mirarte a la cara, y decidí no volverme a confesar; apenas era un crió, ¿yo que iba a saber que eso estaba mal?, pero al final lo entendí completamente

Poco a poco todos comenzamos a separarnos. cada quien se hizo de nuevos amigos, los regresos a casa nunca volvieron a ser iguales.
Aveces coincidíamos Shige y yo, y regresábamos juntos a casa.
Keii-chan nos hablaba un poco, ya tenia mas deberes que realizar para su nueva escuela; en todo ese tiempo solo te miraba de lejos... como ahora lo hago; trataba de llamar inconscientemente tu atención y jamas lo logre.

Existían muy pocas ocasiones en las cuales nos encontrábamos, pero nuestras conversaciones no duraban mucho.

Un buen día, estaba sin hacer nada en mi casa, recuerdo que tocaron la puerta y mi mamá la abrió, me llamo y al llegar a la entrada, me encontré con la sorpresa, de que eran ustedes tres. Ya había pasado bastante tiempo desde que no los veía juntos, me emocione mucho. Me invitaron a jugar y salí.

En ese entonces, pensé que las cosas volvería a ser como eran antes, y esperaba que tu te hubieras olvidado de mi confesión.

Desde ese día, cada tarde después de la escuela salíamos a jugar los cuatro, en la calle frente a mi casa, no pasaban demasiados autos, así que teníamos toda la calle para poder correr.